Porque están diseñadas para enfrentarse a los desafíos más complejos de la impresión. Su recubrimiento especial no solo refuerza la resistencia al desgaste, sino que también evita que la tinta se adhiera con facilidad, fundamental cuando se trabaja con formulaciones pegajosas o de alta viscosidad. Gracias a esta protección, se reduce la acumulación de tinta en la cuchilla, logrando menos interrupciones, menos limpieza y una impresión mucho más constante y precisa a lo largo de toda la tirada.

Una de sus mayores ventajas es que su recubrimiento especial actúa como una barrera protectora frente a la corrosión y la acumulación de tinta. Esto no solo mantiene un flujo de tinta más constante y uniforme, sino que también contribuye a un entorno de impresión más limpio y controlado. Al evitar que la tinta se acumule en exceso, estas rasquetas ayudan a reducir defectos como rayas o manchas, al mismo tiempo prolongan la vida útil del rodillo anilox.

Si trabajas con tintas muy pigmentadas o con partículas más gruesas, la rasqueta GZ-200 con recubrimiento dorado es tu mejor aliada. Su capa protectora no solo ofrece una excelente resistencia al desgaste, sino que también evita que la tinta se adhiera en exceso.