Las rasquetas con recubrimiento cerámico tienen una superficie ultra resistente al desgaste puede superar los 100.000 metros de uso, lo que significa menos reemplazos y mayor eficiencia en la producción. Además, este tipo de recubrimiento ofrece una excelente protección contra la corrosión, generando menos problemas como rayas, arrastre de tinta o variaciones de color. Logrando así impresiones más limpias, nítidas y estables, incluso cuando se trabaja con tintas corrosivas o en procesos de alta demanda.

Estas rasquetas son la mejor elección para procesos exigentes como el huecograbado y la flexografía, especialmente cuando se busca un acabado impecable en colores sólidos, impresiones de alto brillo o cobertura total. Gracias a su recubrimiento cerámico, mantienen un rendimiento uniforme incluso cuando otras rasquetas empiezan a desgastarse. Son perfectas para tiradas largas, donde se necesita consistencia desde la primera hasta la última impresión.

Cuando la impresión no admite margen de error y se necesita una dosificación precisa de tinta, la rasqueta C2000 con recubrimiento cerámico es la aliada perfecta. Su doble capa cerámica le da una durabilidad superior, ideal para procesos que exigen máxima precisión como colores directos, cobertura total, líneas finas, códigos QR o impresiones sobre cuero. Gracias a su resistencia, trabaja sin problema con tintas abrasivas, de alta viscosidad o con pigmentos metálicos, manteniendo la calidad constante y reduciendo el mantenimiento. Convirtiéndose en una opción confiable para quienes buscan resultados impecables de principio a fin.